Las rosas de galleta son una versión elegante y visualmente atractiva de las clásicas galletas de mantequilla. Su textura suave y delicada se logra gracias a una masa rica en mantequilla y azúcar glas, que se divide en dos sabores: vainilla y chocolate. Estas masas se moldean con manga pastelera utilizando una boquilla de estrella, formando espirales o rosetones que recuerdan a una flor. Tras un corto horneado, se obtienen galletas doradas, aromáticas y con un contraste de sabor entre lo dulce y lo ligeramente amargo del cacao puro. Ideales para regalar, acompañar una taza de café o decorar una mesa dulce, estas galletas no solo son deliciosas, sino también un placer visual. Además, se conservan perfectamente durante varios días si se almacenan en un recipiente hermético.
Las rosas de galleta son una versión elegante y visualmente atractiva de las clásicas galletas de mantequilla. Su textura suave y delicada se logra gracias a una masa rica en mantequilla y azúcar glas, que se divide en dos sabores: vainilla y chocolate. Estas masas se moldean con manga pastelera utilizando una boquilla de estrella, formando espirales o rosetones que recuerdan a una flor. Tras un corto horneado, se obtienen galletas doradas, aromáticas y con un contraste de sabor entre lo dulce y lo ligeramente amargo del cacao puro. Ideales para regalar, acompañar una taza de café o decorar una mesa dulce, estas galletas no solo son deliciosas, sino también un placer visual. Además, se conservan perfectamente durante varios días si se almacenan en un recipiente hermético.
Regístrate para recibir actualizaciones por correo electrónico sobre nuevas recetas.