Tarta de Crepes con Dulce de Leche y Queso Crema

La tarta de crepes con crema de queso y dulce de leche es una delicia que conquista a todos desde el primer bocado. Con una base de crepes suaves y doradas, esta tarta se arma en capas generosas con una mezcla cremosa de queso, nata, miel y dulce de leche que la convierte en un postre irresistible.
Primero, se prepara una masa ligera de crepes con huevo, leche, mantequilla derretida y miel, que debe reposar 30 minutos antes de cocerla en sartén. Una vez listas las crepes, se trituran galletas para usar como base crujiente y se monta la tarta con capas de crema y crepes intercaladas.
Este postre es ideal para servir frío, después de refrigerar unas horas. Además, puedes personalizarlo con frutas frescas, chocolate fundido o frutos secos. Es perfecto para celebraciones especiales, reuniones familiares o simplemente para darte un gusto dulce en casa.
Si buscas un postre original, fácil de montar y con mucho sabor, esta tarta de crepes es la opción perfecta. ¡Un clásico reinventado que no puede faltar en tu recetario!

Ingredientes

• 1 huevo
• 300 ml de leche
• 100 g de mantequilla
• 225 g de harina
• ½ sobre de levadura química
• 1 pizca de sal
• 75 g de miel
• 100 g de dulce de leche
• 500 ml de crema agria
• 500 ml de queso crema
• 150 g de galletas

Instrucciones

1. Cascamos el huevo en el vaso de la batidora, añadimos la leche, 25 g de mantequilla derretida, 35 g de miel, la harina tamizada con la levadura y la sal y batimos hasta obtener una masa lisa. La dejamos en la nevera 30 min.
2. Untamos con mantequilla una sartén antiadherente, vertemos un cacillo de la masa y la cocemos hasta que salgan burbujitas en la superficie; la cuajamos por el otro lado y reservamos. Repetimos el proceso hasta agotar la masa.
3. Trituramos las galletas con ayuda de una picadora o pasándoles el rodillo por encima y reservamos. Batimos el queso crema con la crema agria. Agregamos el dulce de leche y el resto de la miel y removemos para integrarlos.
4. Montamos la tarta. Untamos las crepes con un poco de la crema y las apilamos. Cubrimos la torre con la crema restante, también por los laterales y ‘pegamos’ las galletas por el contorno. Refrigeramos la tarta para servirla fría.